'Slalom', vertiginosa realidad en la nieve (Charlène Favier, 2020)

Son pocas las ocasiones en las que el cine nos adentra, como lo hace ‘Slalom’, en la vorágine del deporte de élite. Estamos más que acostumbrados a ver a los deportes ‘rey’ en pantalla, pero nunca nos cansamos de los deportes de invierno, será quizá por lo inalcanzables y fascinantes que se ven para la mayoría de nosotros, que a duras penas hemos pisado la nieve, y mucho menos nos hemos puesto unos esquís para lanzarnos por una enorme pendiente a más de 35km/hora sin nada más que nuestro cuerpo contra el vacío blanco que tu vista alcanza a ver.

Liz, de 15 años, ha sido aceptada en una de las escuelas de esquí más prestigiosas de toda Francia, en un aislado pueblo de los Alpes. Liz compensa su evidente falta de experiencia con una rebeldía innata que llama la atención de Fred, un ex campeón que decide acogerla bajo su manto para entrenarla y llevarla a lo más alto del podio. Pronto, empezará para ella una dura carrera que pondrá al límite su capacidad física y emocional.

Pero ‘Slalom’ es mucho más que el sueño y posible éxito de Liz llevado a la pantalla. Es una historia que nos lanza el guante a la cara y nos reta a mirar fijamente todo lo que supone alcanzar esa meta. ‘Slalom’ arrasa con la inocencia y la juventud de su protagonista. La machaca físicamente y la pone al límite de la cordura emocionalmente y, nosotros, como espectadores, no podemos hacer nada por ella, salvo asistir, impotentes, a la montaña rusa de emociones que es su vida, esa que aún casi no ha empezado a vivir y que ya cuenta con heridas tan profundas que dejarán huella en ella para siempre.

Es magistral ver como se nos dibuja el retrato de esta joven gracias a un guion tan delicado como brutal. Una historia que no olvida nunca quien es la protagonista, cuales son sus metas, una mujer que lucha contra las expectativas, la falta de apoyo y la tensión y responsabilidad que adultos inconscientes y avariciosos dejan caer sobre ella como losas que la asfixian. Liz es una joven tan impresionable como inocente y tenaz, y la directora nunca lo olvida, ni nos deja olvidarlo. La mujer que vemos en pantalla presenta una evolución pasmosa.

Su cuerpo se transforma bajo un entrenamiento que no tiene fin y mientras lo hace se ve obligada a mantener la serenidad y compostura de un deporte que exige una mente férrea para combatir contra la ansiedad y el miedo que nunca la abandonan. La energía que Noée Abita transmite mientras da vida a Liz nos hace casi rejuvenecer, volver a soñar con que todo es posible, si se está dispuesto a pagar el precio de la excelencia.

‘Slalom’ es ese viaje, a por todas, para destacar, para estar en lo más alto. Un viaje que no esconde, ni dulcifica como el abuso sexual se normaliza y se establece dentro de la cotidianeidad de la vida de la protagonista, dejándola confusa y desgarrada. El sufrimiento y la confusión de Liz nos pone los pelos de punta. El trabajo de Noée Abita es tal que es imposible no sufrir con ella, gritar en silencio porque nos sentimos ultrajados, al ver que quienes deberían mimarla, cuidarla y respetarla se aprovechan de su posición adulta de poder para exprimir todo cuanto ella cree debe dar.

La intimidad y complicidad que consigue transmitirnos ‘Slalom’ te sorprende a la par que te golpea. Somos, con su guion, capaces de comprender a una adolescente sin juzgarla. Los diálogos y las situaciones unas veces inmaduras, otras crueles y otras sencillamente repugnantes por su fondo abusivo nos hacen ver a la persona que se nos planta delante de la cámara. Una mujer de la que el sistema social establecido abusa, pero que nunca da un paso atrás, porque entonces se encontraría perdida para siempre.

Hemos hablado de Noée Abita, pero no podemos obviar lo mucho que aporta Jérémie Renier a la construcción de la historia y por supuesto al personaje principal. Dando vida a Fred trae a la pantalla a uno de esos personajes verdaderamente tridimensionales de una construcción complejísima pero a la par inexcusable en sus acciones. Este es probablemente el punto fuerte de ‘Slalom’, la construcción y evolución de la psique de los personajes que nos presenta. Lo cual es decir mucho cuando además también es excelsa en su fotografía, sus encuadres y montaje.

La cinta llega el próximo 11 de marzo de 2022 de la mano de El Sur Films. Si quieres una historia real, equilibrada y con una trama que deja mucho margen para la reflexión mientras te maravillas con escenarios de alta montaña, has llegado a la película indicada. La historia de una superviviente, en todos los sentidos.