‘Las niñas’, educación sexual en la España de los 90

Año 1992. Celia, una niña de 11 años vive con su madre y estudia en un colegio de monjas en Zaragoza. Allí conoce a Brisa, una nueva compañera recién llegada de Barcelona que la empuja hacia una nueva etapa en su vida: la adolescencia. En este viaje en la España de la Expo y de las Olimpiadas del 92, Celia descubre que la vida está hecha de muchas verdades y de algunas mentiras.

A semanas de la gran y esperada gala de los Premios Goya, por fin traigo ‘Las niñas’, la ópera prima de Pilar Palomero que tiene todas las posibilidades de alzarse con la estatuilla a ‘Mejor Película’. A pesar del formato híbrido, telemático y presencial de la gala, espero con ansias la noche del 6 de marzo para poder conocer todos los ganadores. Su gran rival será ‘Ane’, la cual también tiene posibilidades de quitarle la estatuilla, al contrario que el resto de candidatas, sobre todo ‘Adú’, que ha llegado incluso a sorprender por haberse colado en la lista final.

La novel Andrea Fandós, se hace cargo de todo el peso dramático del film y la veterana actriz Natalia de Molina se queda insignificante al lado de esta gran promesa. Si los Goya, no tuvieran una cláusula de edad para aspirar a Mejor Actriz Revelación, Fandós podría llevarse la estatuilla por ‘Las niñas’. La que sí que está nominada es Natalia de Molina, que pienso que esta vez no tiene ninguna posibilidad por su mediocre y efímero papel. Compite contra Juana Acosta, Nathalie Poza y Verónica Echegui, una de las categorías más reñidas.

Un viaje al pensamiento retrógrado de la enseñanza catolicista

Con un guion de la misma Pilar Palomero que consigue remontarnos a la plena pubertad en la España de los 90. Los conseguidos diálogos nos transportan a la historia y a la simple educación sexual de la época que traspasa la pantalla como pocas veces ha ocurrido. La satisfactoria trama llena de realidad todos los planos junto a una difícil pero acertada elección del uso de la grabación en 4:3. Esta arriesgada relación de aspecto dota a ‘Las niñas’ de una madurez totalmente contraria al catolicismo de la enseñanza, como si de una simple paradoja se tratase. La película ha conseguido lo que pretende ser, un grito envuelto por la claridad y la sensatez que augura su directora.

Los productores de ‘Verano 1993’ y ‘La novia’ nos regalan uno de los mayores logros de este año para el cine español. Con metrajes como ‘Las niñas’, se vuelve a demostrar que no hace falta tener un presupuesto millonario para lograr un gran resultado final, sino tener el esfuerzo en querer transmitir emociones que conquisten y hagan viajar al espectador. La película se apodera de una forma muy silenciosa y desde el punto de vista de unas niñas con todo el mundo aún por descubrir…