Reflexiones sobre ‘España, la primera globalización’ (José Luis López-Linares, 2021) | No hay otra historia que se pueda comparar |

No hay otra historia que se pueda comparar‘. Tras una suerte de introducción, así comienza el documental “España, la primera globalización”, un viaje por la Historia Moderna de la Monarquía Hispánica y de los territorios del imperio allende los mares. El título es tan rotundo que va a marcar el carácter taxativo predominante durante los siguientes 106 minutos. A modo de abstract, el documental presenta un relato legitimador de la presencia castellana en América a lo largo de los más de 325 años de presencia en el territorio. Y no es baladí la fecha de su estreno el 15 de octubre ya que está muy cercana a la celebración del 12 de octubre, el Día de la Hispanidad.

No hay otra historia que se pueda comparar (la del mal llamado Imperio Español), como si hubiera una escala comparativa de grandes acontecimientos tangibles e históricos que pudieran seleccionarse entre los más importantes de todos los tiempos. Así lo defienden las distintas personalidades que se suceden en este documental histórico, tales como escritores, filósofos, doctores y catedráticos de Historia. De la misma manera, la producción tiene el beneplácito de la Real Academia de la Historia, un cuerpo académico formado por hombres en su mayoría y especializado por encima de todo en los momentos más gloriosos de la historia de nuestro país. Por ello, el Think Tank conservador tiene un tremendo empuje ante semejante apoyo y suma así más créditos en su afán por renovar la imagen política de los últimos tiempos.

Sin embargo, es menester recordar el pasado reciente de esta institución, que ha estado salpicado de ciertas polémicas. Por ejemplo, la Real Academia de la Historia en 2011 comenzó a aglutinar bastantes críticas en torno a la publicación del Diccionario Biográfico Español, en el que se definió a Francisco Franco como Generalísimo o Jefe del Estado pero no dictador que montó un régimen autoritario pero no totalitario, una entrada escrita por el académico Luis Suárez, antiguo alto cargo de la administración franquista. Sin embargo, para Juan Negrín, presidente del Gobierno de la Segunda República, sí hubo una referencia a un gobierno dictatorial. También es necesario no olvidar que la RAH está presidida por Carmen Iglesias, que antes de ser elegida la primera directora de la Real Academia de la Historia, fue tutora de Cristina de Borbón, fue profesora de Historia del actual Felipe VI y fue presidenta del grupo Unidad Editorial, editora del diario El Mundo.

En relación a ello, también es necesario acordarse de que la propia Real Academia de la Historia ha reafirmado su compromiso con el conocimiento de la acción de España en América, más allá de falsificaciones, tergiversaciones y manipulaciones interesadas ya que el presentismo, que valora personajes históricos con parámetros actuales, simplifica y desenfoca la acción en América. Sin embargo, este alegato tiene un difícil encaje con la propia entrada que la RAH realiza en su Diccionario Biográfico Español al hablar de Cristóbal Colón: La historia de Colón ha sido contemplada no como la de un simple mortal, sino como la de un mitológico semidiós capaz de gestas extraordinarias. Que cada cual saque sus conclusiones.

Durante toda la proyección, hay una tesis principal que ha vehiculado el discurso del visionado: deslegitimar la visión negativa que se tiene sobre la historia de España, tanto interior como exteriormente, especialmente en lo relativo al continente americano. A priori, dicho argumento es loable y así se ejemplifica en aquellos momentos en los que se ensalzan el papel de la ciudad de México como nexo del Imperio o del olvidado y poco conocido papel de las Filipinas y su conexión con China y, por ende, con el mercado asiático. Sin embargo,  a pesar de ello, se han basado en tres aspectos fundamentales que desmerecen el fin explicado previamente: la defensa a ultranza de un nacionalismo español, la confección de una sesgada y revisionista óptica de la Historia en donde se presentan acontecimientos tan edulcorados que son a todas luces irreales y, por último y la más prosaica, escurrir el bulto hacia afuera con la famosa estrategia del “y tú más”.

No obstante, estos no son los únicos errores que vertebran todo el documental. Existe otro gran problema en el que incurren la mayoría de participantes: no hay España todavía. No existe España y no existirá como tal hasta el s. XVIII y la llegada de los Borbones a la península. El nombre oficial del estado que se desarrolló durante los siglos XV-XVII fue el de Monarquía Hispánica: un conglomerado político multiétnico conformado por numerosos territorios muy dispersos los unos de los otros que, si bien tenían un centro neurálgico en la península Ibérica, eran independientes entre sí y tenían sus propias instituciones. Por ejemplo, los territorios de las Indias Occidentales (América) dependían de Castilla únicamente y Aragón no tenía ni voz ni voto en tales asuntos. Por tanto, asimilar conceptos históricos de unas épocas a otras (el famoso presentismo que la RAH tanto denuncia) es un traspié que no deberían cometer tales personalidades.

Comencemos con la cuestión de base: la visión negativa de la historia de España. Estudié en Galicia y los Reyes Católicos eran el demonio. Así comienza su argumentario Pedro Insúa, filósofo y escritor colaborador del diario online Libertad Digital, que nos presenta una visión oscura, pesimista y deformada que el sistema educativo estatal fomenta de la historia de España, al que incluso compara con el mito de la caverna de Platón. En la misma línea se muestra Elvira Roca, historiadora y autora del polémico ensayo “Imperiofobia y Leyenda Negra”. En esta obra se realiza una crítica a esta visión pesimista de la historia española al tiempo que analiza algunos episodios históricos con unos cuantos giros argumentales que acaban tergiversando los acontecimientos. De hecho, tan polémica fue la obra que existen numerosos artículos y periódicos que enumeraron todos y cada uno de los errores cometidos.

De la misma manera, esta tesis es defendida por más historiadores, como Natalia Denisova, que en sus entrevistas en el documental y en El Imparcial argumenta la excesiva imagen peyorativa de la Monarquía Hispánica, contribuyendo al engrandecimiento constante de la leyenda negra española. Y como colofón, el historiador e hispanista Stanley G. Payne también sale en defensa de la necesidad de revisar el concepto de la leyenda negra sobre la llegada de los castellanos a América y de la crítica total por la llegada del catolicismo al continente. Conviene recordar que Payne es un viejo conocido por la historiografía española ya que teorizó que las elecciones de 1936 fueron un fraude, que los representantes del gobierno democrático de la República fueron los que se alzaron en armas, justificó el golpe de Estado de Franco o definió la Ley de Memoria Histórica como una costumbre soviética. La aparición de esta figura en el documental es toda una declaración de intenciones.

Por tanto, habiendo aclarado la premisa fundamental, analicemos los tres pilares del documental.

Análisis

Durante el visionado de todo el documental se destila un aroma a nacionalismo español (a veces de manera velada y en otras ocasiones no tanto). Por ejemplo, Pedro Insúa afirma que la visión negativa es la que hay que desterrar y para eso propone estudiar las grandezas de la historia de España. Por ello, considera que España surge en esta época y el mundo antiguo se viene abajo y que los españoles, como católicos que éramos, mirábamos a todo y aspirábamos a todo. Roca argumenta que Ese imperio [Monarquía Hispánica] fue un momentazo de la historia de la Humanidad y yo no creo que nadie tenga que avergonzarse de él, salvo que media humanidad esté decidida a avergonzarse de sí misma. Así define la conquista y ocupación de más de 300 años por parte de la Monarquía Hispánica del continente americano. En la misma línea argumentativa se han mostrado algunos políticos en los últimos días, como por ejemplo Isabel Díaz Ayuso con su frase España llevó la civilización y la libertad a América o Toni Cantó con su sentencia la conquista fue un hito que liberó a los sojuzgados por un poder que era absolutamente brutal, salvaje e incluso caníbal.

El economista y político Ramón Tamames, en esta corriente ensalzadora del pasado glorioso, afirma que Cortés es el inventor de México. Construye las bases de una nación. ¿Qué leyenda más portentosa que esa? Lo que Tamames no explica después es que Hernán Cortés, tras dos meses y medio de cerco a la capital, destruyó la ciudad de Tenochtitlan y murieron cerca de 240.000 personas, destrozando de paso la herencia cultural azteca.

Con el ánimo de engrandecer ciertos episodios de la historia que se cuenta en el vídeo, se retuercen ciertos argumentos para remedar ciertos pasajes de la Historia. Y así pasamos al siguiente pilar del vídeo: una visión sesgada y revisionista. Por ejemplo, a la hora de hablar de la expulsión de los judíos peninsulares, donde se habla de la raza judía, se niega el racismo en dicha expulsión y se propone la fácil solución de que, para no ser expulsado, bastaba sólo con bautizarse y hacerse converso. Y ya está, parafraseando a Pedro Insúa. Lo mismo se intenta con la Inquisición, a la que se acaba justificando: la Inquisición nace precisamente para que el delito de intolerancia religiosa esté sometido a un proceso legal, estructurado […] frente a otros territorios.

De este modo se tratan temas como la Reforma protestante, considerando sus diversas variantes (protestantismo, calvinismo, etc.) solamente como herejías opuestas al orden católico y al poderío español imperante en ese momento, sin tener en cuenta otras posibles circunstancias como el deterioro espiritual de la Iglesia Católica o la crisis social y económica del momento. Toda esta disertación capciosa viene acompañada con una serie de imágenes de fondo en las que muestran al reformador Martin Lutero con esvásticas nazis de fondo. Si eso no es una visión tergiversada de la historia, que baje el propio Lutero y lo vea. También se hace un revisionismo sobre la guerra contra Inglaterra, donde se califica a la pérdida de la Armada Invencible como una derrota honrosa, y se argumenta que estudiarlo como lo hacen los ingleses y no como debería hacerse aquí en España es un componente suicida, hablando de criterios de evaluación, esperemos.

Sin embargo, lo más gravoso es la negación categórica sobre un hecho tan contrastable histórica y científicamente como la desastrosa pérdida poblacional que sufrió el continente americano con la llegada de los conquistadores europeos. Esta postura es defendida por Marcelo Gullo, historiador argentino negacionista del genocidio en América y defensor del papel salvador de la Monarquía Hispánica. Es autor de “Madre patria: desmontando la leyenda negra”, donde arguye que el famoso genocidio no existió. En realidad la conquista de México no la hizo Hernán Cortes sino que la hicieron los indios. De hecho, esta tesis tan radical es refrendada por Patricio Lons, otro historiador revisionista que defiende la presencia castellana durante los tres siglos siguientes como una época de paz y prosperidad, ya que la guerra de independencia no fue el final de una lucha de 300 años. No. Durante 300 años se vivió en paz en América. Y como broche final a esta misma idea, la historiadora Adelaida Sagarra afirma que cuando uno estudia el s.XIX, y escarba un poco en lo que fue la legislación argentina, se encuentra con el concepto de exterminio. Cuando uno estudia el s.XVI, se encuentra con que toda la legislación es pro súbditos indígenas. Es decir, se pretende confirmar la benevolencia de unos europeos benefactores y no la imagen de unos conquistadores agresores.

Por último, llegamos al argumento más banal (e incluso a veces hipócrita) de todos: “y tú más”. Resulta muy poco académico tratar los problemas propios azuzando los ajenos. Por ejemplo, en este sentido, se critica que sólo sepamos la fecha de expulsión de los judíos en España (1492) y que no se conozca la expulsión de los judíos del resto de Europa, donde incluso se empezó a expulsar a la comunidad judía mucho antes que en la península. Una buena reflexión sería el plantearse por qué la Monarquía Hispánica incurrió en el mismo error que cometió Inglaterra 204 años antes cuando expulsó primero a la comunidad judía y, la Monarquía Hispánica, dos siglos después no diseñó un mecanismo alternativo para evitarlo.

Carmen Iglesias, directora de la Real Academia de la Historia, nos recuerda que en Francia y en Inglaterra se quemaron más brujas que en nuestro territorio durante los siglos XVI-XVII y, para ello, se exponen una serie de registros donde así se demuestra. Más adelante, acaba criticando la supuesta libertad religiosa de los príncipes protestantes del norte de Europa para elegir la confesión religiosa de su territorio (“cuius regio, eius religio). Precisamente esta idea que se criticaba antes es lo que harán los conquistadores en América cuando impongan la cristianización forzosa a todos los indígenas del continente, y de manera mucho más brutal.

De la misma forma, en el documental se defiende la idea de que la presencia castellana en América no fue una colonización al uso, sino que la Monarquía Hispánica fue incorporando territorios y a todos ellos llevó sus modos de vida, sus derechos, sus acueductos, sus ciudades, sus sistemas de organización. Siguiendo esta misma idea, la historiadora Enriqueta Vila afirma que la conquista de España en América no se le debe llamar colonización porque no hicieron colonias. En el Imperio Americano se trasladó la forma de vivir de los españoles y los españoles se trasladaron allí. Colonias nunca han sido. Sin embargo, no se dice que dichos territorios americanos no tenían representación política y estaban supeditados a la Monarquía, como un ente dependiente de Castilla. Esta falta de autonomía política será uno de los motivos de las revoluciones independentistas del s. XIX. Así que no: España no generó otras Españas, como aseveran en el vídeo constantemente, a modo de mantra.

Siguiendo con esta premisa, al hablar del tratado de Guadalupe Hidalgo (1848), se comenta el genocidio que los anglosajones cometieron con las reservas y misiones indias que los castellanos dejaron en el territorio que perdió México frente a Estados Unidos (el suroeste norteamericano): La mayor parte de las tribus y de los pueblos que había en California desaparecieron cuando el Imperio Español desapareció. Pero sin embargo no se menciona el genocidio que se cometió durante el s. XVI en el continente americano donde se diezmó hasta en un 80% la población indígena. Un profesional de la Historia no debería jugar con la doble moral: a todos debe aplicársele el mismo filtro, calibrando según la época histórica en la que se encuentre evidentemente.

Como conclusión, parafraseo a Juanlu Sánchez, subirector de elDiario.es y presentador del podcast “Un tema al día”: llega el Día de la Hispanidad y mientras en España el ejército desfila por la calle, en América Latina tumban estatuas de Cristóbal Colón. El Papa pide perdón por los abusos de la conquista y la derecha española se ríe de él y apela al orgullo imperial. Y este documental se enmarca en esta corriente legitimista y benefactora del mal llamado descubrimiento (conquista) de América. No es solamente una cuestión de legitimación de la presencia castellana o no, sino que el debate va más allá y debería enmarcarse en las corrientes indigenistas americanas que fueron arrinconadas con la llegada de los conquistadores y que hoy en día, cinco siglos después, siguen marginadas de los centros de poder político y económico de sus respectivos países. Y mientras tanto el documental se limita a ensalzar y glorificar un pasado colonizador de épocas pretéritas.

Por tanto, nos hallamos ante un debate amplio, complejo, que afecta a muchos interlocutores, que debería de tratarse desde una perspectiva mucho más integradora e inclusiva y que no creo que deba resumirse en frases tan simples y dañinas como el indigenismo es el nuevo comunismo o que deban zanjarse con aseveraciones tan graves como la primera globalización o No hay otra historia que se pueda comparar.

Por Ángel Villar

Tráiler

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73 comentarios en “Reflexiones sobre ‘España, la primera globalización’ (José Luis López-Linares, 2021) | No hay otra historia que se pueda comparar |”

  1. Bueno, esperaba leer una critica algo más centrada en los aspectos audiovisuales, pero es básicamente una centrada en las polémicas históricas y sus interpretaciones. Así que vamos allá. No voy a defender una visión edulcorada de la presencia española en América, pero es evidente que actualmente existe una corriente de deslegitimización y denigración de dicha presencia, como si todos los males de las comunidades indígenas en toda América fueran culpa de los 300 años de presencia española en América. Como ejemplo de esa corriente tenemos el reciente discurso de Joe Biden el lunes 11, en el que cita el daño que muchos exploradores europeos causaron a las naciones tribales (¿considerará él a Thomas Jefferson, el ideólogo e impulsor de la política de EE.UU. con respecto a las naciones indígenas, como explorador europeo? no lo creo), o significar las contribuciones de los millares de italo-estadounidenses y obviar las españolas (¿de verdad es por ignorancia de la historia de su país el obviar las contribuciones de los españoles, por no citar la de los territorios independizados de España, a la historia y costumbres de EE.UU.?).
    Y ya que estamos con las tesis del indigenismo, ¿de verdad alguien cree que el «descubrimiento» de América por algún otro pueblo, bien europeo (portugueses, ingleses, franceses, holandeses), bien asiático (chinos, japoneses), no hubiera causado muerte por enfermedades en las comunidades indígenas y situaciones de abuso y explotación?

    1. Marta Pedraza

      Muchas gracias por la aportación. Cómo bien comenta es más una reflexión sobre lo visto en el documental, tal y como indica el encabezado del artículo. Se trata de un tema de una gran complejidad, muy matizable y con muchas caras, de ahí que sea un debate tan rico si se hace desde el respeto, tal y cómo usted con su comentario aporta. Le agradecemos sus palabras, esperamos regrese a nuestra web en un futuro.

      1. Totalmente en desacuerdo con el artículo, más de lo mismo: leyenda negra bien calada en toda la memoria colectiva…solo referida a España, claro, la leyenda negra de las demás colonias de otros países en Asia y en América ni está ni se la espera, y no es por el «y tú más» es por poner en el contexto histórico del momento… Hay capítulos como la guerra del opio (colonias inglesas, sudeste asiático) que son vergonzos y muy desconocidos, en fin, una pena, la visión anglosajona de la historia mundial prevalece, y aplaudida por los más atacados: mucho desconocimiento…

        1. Isabel, Isabel, la semilla del nacionalismo más rancio anida en tu mente, y está creciendo y creciendo… y no te das cuenta. Autocrítica ya, y dejémonos de compararnos con otros imperios

  2. Elvia Martin del Campo

    ¡Bravo! Pensé que era otro artículo de esos que, sin haber estado ahí y entonces, aseguran que los españoles vinieron a repartir dulces cultivar la tierra y cargar bloques de piedra para construirles casas a los indios. Porque eran un pan de Dios, sin el menor deseo de hacer fortuna.
    Lo cierto es que la capital del imperio de Moctezuma ejercía un gobierno tiránico; un hecho que Cortés aprovechó. El éxito de la empresa fue posible porque, además de contar con numerosísimos aliados, el capitán extremeño era (porqué no decirlo) un hombrfuenteligente y arrojado. Si los aztecas no hubieran cimentado su liderazgo en el miedo y la sangre, tal vez los pueblos indígenas se habrían unido para hacer frente al invasor. En el siglo que siguió la población disminuyó no sólo por las enfermedades, sino por la desnutrición y el exceso de trabajo. Mucho se alega que las leyes los protegían, pero en un territorio tan grande dudo que se pudiera vigilar su cumplimiento. Además, si la monarquía hispana no afianzaba el terreno conquistado, lo iba a perder en una competencia contra otras coronas. El incentivo para que los colonos defendieran el virreinato fue tener una vida lujosa, que no podía tener en la península.

  3. Este análisis si es exageradamente sesgado. El declie poblacional en la América Española fue producto de la viruela (lea las Leyes de Indias, no es tan difícil). En el siglo XVI ya exístía el nombre de España, y existen numerosísimos documentos que lo atestiguan. ¿Críticas a la obra de Elvira Roca? Si cuatro progres resentidos y envidiosos, no más. Por supuesto que hubo fraude en las elecciones de 1936. En fin, nada nuevo, escribir muchas líneas para no decir nada. Po supuesto, las tribus amerindias vivían en paz y armonía antes de la llegada de Colón. Viaje por América, que no le vendrá mal (yo viví 7 de crío en Caracas), antes de opinar sobre algo de lo que no tiene ni idea.

    1. Respecto a la colaboración con Alfonso X, rey de Castilla, en la conquista de Murcia, Jaume I la justificó diciendo:
      «La primera cosa per Deu, la segona per salvar Espanya, la terça que nos e vos haiam tan bon preu e tan gran nom que per nos e per vos es salvada Espanya.»
      Llibre dels Fets

    2. Joaquín Miguel Bonnemaison Sanchez

      Magnifico Javier. Lo bueno si breve, dos veces bueno, como dijo Baltasar Gracia.
      Totalmente de acuerdo contigo. Esta persona no creo que sea historiador, y evidentemente es alguien que conoce muy poco de historia y que tiene todo los secos mentales de determinadas ideologías que prefiero no citar aquí. A buen entendedor pocas palabras basta.

  4. Carlos Javier

    Sr Villar la historia se ve muy bonita a toro pasado..si quiere hacer un juicio de valores sobre la conquista y evangelización del nuevo mundo por parte de la corona española procure ser más subjetivo y/o imparcial..y no se deje llevar por esa progresia farisea que rezuma odio y envidia..le recuerdo que yo me siento muy orgulloso de éste país y de su historia cosa que en otros países de Europa nos han tenido igual que usted envidia y demás u acaso España que cogió el testigo y el timón de otras dos grandes civilizaciones como fueron en su día Grecia y Roma y posteriormente la corona Hispánica no es para ello..Acaso esa Europa cínica e envidiosa de está nación la primera se lo recuerdo como tal en el mundo..yo puedo entenderlo..pero claro podría parecer grotesco pero es cierto el problema lo tenemos en casa con gente como usted y otros como usted que se dedican a tergiversar la historia a manipularla y ha difamar…

  5. Soy un cinéfilo empedernido y me encanta el genero documental y es la primera vez que leo en un medio ¿especializado? en cine, una crítica que no va dirigida al máximo responsable del trabajo artístico, el realizador, o a la técnica empleada para contarnos una historia. No, en este caso el crítico se pone la bata de realizador y te describe el documental que él hubiera realizado. Para ello descalifica, por un pasado oscuro y sospechoso, a todos los intervinientes en el documental (escritores, filósofos, profesores, doctores y catedráticos de Historia) que relatan sus puntos de vista motivados por sus estudios, y los confronta con los suyos de crítico. Nada dice de la dirección, guion o fotografía. No, nada, ni que al menos ocho de los entrevistados sean de claras tendencias izquierdistas. No mezclemos la política con la historia. Para el sr critico todos son conservadores (rancios) y han desperdiciado sus vidas estudiando cosas que él puede rebatir simplemente “pensado” lo contrario. Desastrosamente para ellos no saldrán en el documental sobre lo mismo que él tiene en mente. Dan igual las fuentes primarias, tradiciones, leyes, evidencias o testimonios. Y aun así es generoso, pues escribe que solo el 80 por ciento de los indígenas desaparecieron, cuando algunos dicen el 95 por ciento. ¿de donde salen esas cifras? Da igual, él es el crítico. No mezclemos.

    Visto lo visto es un documental totalmente necesario.

    No sabía que Franco, Negrin, Isabel Díaz Ayuso, Toni Cantó y los soviets estuvieran en el siglo XVI al XVIII, pero si tu lo dices…

    1. Marta Pedraza

      Agradecemos tu comentario. Cómo bien pone nada más empezar el titular se trata de unas reflexiones sobre el contenido, no es una crítica cinematográfica al uso, tal y como solemos realizar en este medio.
      La persona encargada de realizarla no ha sido un crítico de cine, sino un historiador que ha aportado su opinión crítica de lo que ha visto al respecto. No tiene que gustar, pero tampoco creemos que deban ponerse palabras en su boca que no han salido de ella.
      Nuevamente gracias por la aportación, nos hace a todos crecer y tener variedad de opinión siempre lo consigue.

    2. “donde se habla de la raza judía, se niega el racismo en dicha expulsión y se propone la fácil solución de que, para no ser expulsado, bastaba sólo con bautizarse y hacerse converso”
      Respuesta: Como puede ser una ley racista si los judíos y cualquier persona sin importar su color de piel podía convertirse? Era un cuestión política, cuya explicación se puede leer en la Recopilación de Leyes de España, con sólo leerlas se pueden refutar muchas mentiras que supuestos historiadores repiten como loros.

      «Pero sin embargo no se menciona el genocidio que se cometió durante el s. XVI en el continente americano donde se diezmó hasta en un 80% la población indígena. Un profesional de la Historia no debería jugar con la doble moral: a todos debe aplicársele el mismo filtro, calibrando según la época histórica en la que se encuentre evidentemente»
      Respuesta: para empezar hay una gran diferencia en las intenciones, al autor le parece lo mismo: escribir, creer, que la raza blanca anglosajona es superior, que los mejores indígenas son los muertos o que no hay que mezclarse con ellos, a escribir, creer, que hay que evangelizar el continente sin escribir nunca una nota genocida?? Me pueden mostrar un ejemplo de pensamiento genocida español?? de algún monarca o Virrey. Tampoco es lo mismo transmitir gérmenes que involuntariamente producen pandemias, como la pandemia que casi hizo desaparecer a los mayas antes de la llegada de los españoles… acaso los chinos intentan exterminarnos con el C***19? La gripe española de 1918 fue otro intento genocida de los españoles? y la peste negra? XD

      “Contrastable histórica y científicamente como la desastrosa pérdida poblacional que sufrió el continente americano con la llegada de los conquistadores europeo”
      Respuesta: Es cierto que hubo un descenso de población pero no existe ninguna cifra ni datos científicos, es estúpido sostener el genocidio a estas alturas viendo la proporción de población indígena del continente, que fortalecieron sus lenguas gracias a la ayuda de la monarquía hispana. Por el contrario, dar mantas a los indígenas 300 años después cuando ya se sospechaba lo que hacían, mientras se pensaba como “ilustre racista”, SI parece genocidio:
      “Todas las colonizaciones que en estos tres últimos siglos han hecho las naciones europeas han arrollado delante de sí a los salvajes que poblaban la tierra que venían a ocupar. Los ingleses, franceses y holandeses en Norteamérica no establecieron mancomunidad ninguna con los aborígenes y, cuando con el lapso del tiempo sus descendientes fueron llamados a formar estados independientes, se encontraron compuestos de las razas europeas puras, con sus tradiciones de civilización cristiana y europea intactas, con su ahínco de progreso y su capacidad de desenvolvimiento, aún más pronunciado si cabe que entre sus padres, o la madre patria.

      De muy distinto modo procedió la colonización española en el resto de América. Sin ser más humana que la del Norte, por aprovecharse del trabajo de las razas indígenas esclavizadas, acaso por encontrarlas más dóciles también, incorporó en su seno a los salvajes; dejando para los tiempos futuros una progenie bastarda, rebelde a la cultura y sin aquellas tradiciones de ciencia, arte e industria que hacen que los deportados a la Nueva Holanda reproduzcan la riqueza, la libertad y la industria inglesa en un corto número de años” Faustino Sarmiento.

      – El pensamiento racista genocida era muy común entre los espías y “libertadores” que destruyeron la unión de Hispanoámerica y tergiversaron su historia:
      “Los españoles cometieron dos grandes errores en Sud-América, á saber: esclavizar á los naturales v enlazarse con ellos. El primero fué una gran crueldad inflijida á los indios, y el segundo un mal irreparable hecho á sí mismos, porque en vez de mejorarla raza con que se vinculaban, se rebajaban á su nivel. Las interminables guerras civiles de los turbulentos, indolentes y desenfrenados mestizos, sus tremendas y mútuas carnicerías, que han despoblado provincias enteras, son la consecuencia de aquel fatal error, y hay razón para temer que el reinado de paz solo se iniciará CUANDO HAYA DESAPARECIDO TODA LA RAZA MISTA (sic), cuando los descendientes de los opresores y los oprimidos hayan sido igualmente aniquilados por la terrible venganza exijida por las atrocidades de los conquistadores. Si hubieran obrado á este respecto con la misma cautela que nuestros colonos en la América del Norle, y se hubieran abstenido de todo «comercio con los paganos», cuán diferente hubiera sido el resultado”. Masterman, George Frederick. Siete años de aventuras en Paraguay (1870).

      “cuando uno estudia el s.XIX, y escarba un poco en lo que fue la legislación argentina, se encuentra con el concepto de exterminio. Cuando uno estudia el s.XVI, se encuentra con que toda la legislación es pro súbditos indígenas”… ASÍ ES EN TODA HISPANOAMÉRICA SANCHOS: ahora vuelvan a estudiar con mayor detenimiento!

  6. Hola Marta. Lo de que es Historiador no se ha puesto por ningún lado, tendré que creerte por que tú lo dices. Supongo que por algo le pagáis. Ansioso me tienes de leer las reflexiones de “historiadores” contratados por esta revista para documentales ingleses, franceses, rusos etc.. sobre sus historias. Para una revista de cine se exige mucho más que un artículo de “EL PAIS”. Opiniones ricas y destructivas tenemos todos, pero creo que esto no es Twitter, y la relatividad y riqueza de las opiniones de quien se basa en el descredito velado o directo sin analizar la totalidad de datos que se ofrecen durante 106 minutos y tanto trabajo, es triste. Dedicaros al cine mejor. No entréis en la sala con vuestros prejuicios y creceremos juntos.
    Gracias.

    1. Buenas tardes: ayer estreno en Alicante, varios minutos de aplausos al finalizar.
      Yo estoy de acuerdo con las opiniones de los catedráticos que hablaron en el documental.
      Historia: si de catedráticos, no de políticos.
      Me gustaría que lo vieran: AMLO, nuestro santo padre el Papa y Biden.
      Se me quedó bien sabor de boca…

    2. Marta Pedraza

      Javier, tienes a bien creerme o no. Eso ya cae de tu lado. En esta revista digital solo contamos con colaboradores. Muchas gracias por pasarte, puedes volver o no, pero aquí siempre escribiremos lo que consideremos oportuno, le guste o no a quien entre a leernos.

      1. José Maria Rodríguez de León

        Hay q ser riguroso y no contar lo q os gustaría a la izquierda, yo he dejado de ver cine Español hace mucho tiempo porque no creo q se haga buen cine en España, hay muchos prejuicios malos profesionales y peores críticos como este Sr. Villar.

  7. Parece que a Ángel Villar no le gusta la interpretación de aquella parte de la Historia de España que hacen los historiadores que salen en el documental, debe ser porque no se ajusta a lo que se espera que deben de pensar ahora sobre aquella época. Esto es lo que suele pasar cuando nos ponemos a juzgar con nuestros valores y patrones de pensamiento actual hechos del pasado. Mañana iremos a verla, me apetece ver una visión más positiva de la Historia de mi país, de la otra ya se ocupan machacónamente los que quieren que pensemos todos de la misma forma.

  8. Lo has dado en el clavo. Acabo de verla y vengo a casa pensando en todos los aspectos del documental y coincido casi punto por punto. Más o menos has puesto en palabras justo lo que estaba pensando. Me da mucha pena esta película. Tenía mucho potencial y era una buena oportunidad para presentar un momento de la historia española con un enfoque más justo y equilibrado, algo que se merece este país. Sin embargo, se perdió por motivos tendenciosos, contraataques pueriles y argumentos sesgados y inexplicables, y como consecuencia perdió seriedad académica. Y eso que había cosas muy interesantes como el papel de México, el de las Filipinas, la plata y China, el descubrimiento de las rutas de comercio en el Pacífico, etc. Pero hubo unas meteduras de pata que posiblemente acabarán consiguiendo lo contrario de lo que pretendía el director. Qué lástima.

    1. Brian, no se entiende muy bien qué quieres decir. ¿No será que sigues la línea de análisis, anacrónica y tópica, impuesta durante siglos por la historia fabulada en el lado anglosajón?

    2. José Maria Rodríguez de León

      Hemos debido de ver diferentes documentales.
      Es q no entiendo muy bien lo q quiere decir.

  9. Es increíble que aún a día de hoy los críticos cómo el que escribe este texto desconozca la diferencia entre Nacionalismo y Patriotismo.
    También es lamentable que lejos de realizar una crítica sobre el documental (que aporta DATOS), se pierda en sus ideales políticos contra-atacando con ideas, suposiciones y prejuicios.
    No voy a mentar todos los errores históricos que aporta ( lo de España como nación le deja en muy mal lugar)…En cualquier caso se le pierde el respeto profesional y no aporta una muy buena opinión del medio para el que escribe. Yo revisaría la crítica alejando sus creencias personales y me ceñiría de nuevo al Documental.

  10. La mayoría de comentarios de los usuarios van en una dirección. En mi caso, es la primera vez que leo un crítica de cine en esta página. Pues me ha pasado un amigo el enlace. Vi el documental el sábado.
    Este señor historiador, evidentemente con sesgo negrolegendario, hace, precisamente, lo mismo que critica. Desde el primer párrafo ya deja caer la sombra del ‘fachismo’ sobre todo el documental. Así como del machismo del mismo, de una manera sutil: «la producción tiene el beneplácito de la Real Academia de la Historia, un cuerpo académico formado por hombres en su mayoría»
    Un cuerpo académico formado en su mayoría por hombres, pero presidido por una mujer… Pero claro, es que esa mujer ¡se junta con los Borbones! Así que no cuenta.
    Todo ello antes de iniciar el análisis.
    Lo curioso es que todo es malo. Todo. El documental, realizado por expertos, no tiene nada bueno o veraz.
    Junto con la persona que me ha enviado el enlace y otro amigo, desde que empezó el tema Covid (que según el sr. Villar seguramente será una virus creado por los ‘no españoles’ del siglo XVI) nos ha dado por la historia. Lógicamente, puros amateurs, pero buscamos, comparamos y , luego, exponemos lo que hemos visto.
    España, no hace falta tacharlo, ya tenía su idea o germen en los Visigodos, puede leer algo de Daniel Gómez Aragonés y poder rebatirle. De ahí, la idea que tenían de Reconquista, que también está puesta en duda en estos tiempos.
    Lope de Vega, para glosar la increíble vida de Diego García de Paredes, nombra como en el campo de batalla, gritaba ‘España, España’…
    Pero claramente Lope de Vega, Cervantes, Quevedo,… Era nacionalismo español.
    Es una pena que tratando de dar datos ‘buenos’ sobre la historia de tu país, todo se desvirtúe a Nacionalismo Español.
    Ni Leyenda Rosa, ni Leyenda Negra: Nacionalismo Español

    Como he leído en un comentario anterior, está claro que es un documental necesario.
    Espero que no sea el único.
    Venga a uhtede

    1. Me encanta, entonces los españoles tendréis que iniciar un proceso de desvolonización y reparaciones por las ocupaciones de Cantabria, Vasconia, Suevia, Rucconia, Sabaria, Córduba y Asturia por parte de los visigodos. Os dejamos toda América para vosotros. Hasta más ver!

  11. Propaganda progre con un tufo ideológico caza subvenciones tremendo. Ni he conseguido saber quién lo firma. ¿Un historiador? Más que historia lo que hace un compendio de lugares comunes del pensamiento progre. En fin lo típico. Me gustaría saber porque Google se empeña en mandarme resultados de propaganda progre. Luchamos no sólo contra la ignorancia y la mala baba sino contra los ejecutivos de Twitter, Google, Facebook y la mayoría del sistema totalmente dominado por el estreñimiento progre.

    1. Creo que te equivocas al señalar al «progre» en el transfondo de toda esta gran mentira que es la leyenda negra y la hispanofobia. Detrás sigue habiendo poderosos intereses y tienen nombre y apellido anglosajón, holandés, francés…

  12. El que firma el artículo puede ser Miguel Ángel Villar Pinto, un escritor gallego de 44 años. Hizo la carrera de Historia. A quien le interese puede encontrar su bibliografía en Wikipedia, un abrazo desde Galicia

  13. Joaquín Miguel Bonnemaison Sanchez

    Mi padre, maestro nacional con su título por la II República, tenía un refrán.magnifico: «La ignorancia es atrevida, y la necedad su maestra».
    A buen entendedor, pocas palabras bastan.
    Sería excesivamente largo rebatir aquí todas las afirmaciones de este señor, pero dudo mucho que haya leído ningún libro de los 39 historiadores que aparecen en el documental.
    Lo único que quiero significar, es lo triste que es observar lo que provoca el sesgo del sectarismo ideológico, que nubla la razón, y en dónde sólo impera la maestra antes aludida.
    Por último, quiero aclararle, ya que soy jurista, que para que exista genocidio, debe existir una voluntad y una consciencia (elementos determinantes del dolo) deliberada para conseguir la finalidad de exterminar una determinada etnia o raza, como de hecho sucedió con los nazis en relación con el pueblo judío. Esto no existio ni en la voluntad ni en la conciencia de los conquistadores. Se produjo por una causa ajena, impredecible y desconocida en aquella época: los virus, en concreto la viruela.
    En cambio, si habría que quitarle una calle o una estatua al Coronel Fremont en California ( por sólo citar a uno) y no a Fray Junipero Serra, porque el primero si cometió lo que actualmente definimos como delito de genocidio frente a las tribus indias de los EEUU de América.

  14. Hola. Antes de escribir estas líneas he leído los comentarios ya publicados para conocer las opiniones de quienes las hicieron, me gusta explorar líneas de pensamiento ajenas a la mía. De hecho voy a comentar varios de ellos, pero ya llegaremos a eso. Oh, un detalle a lo loco al que luego daré su debido contexto: soy apolítico.
    Me interesó el documental desde el tráiler. En cine lo vi, dos veces. El trasiego de documentos históricos y cuadros de la época es impresionante. El reparto escogido de expertos y académicos en sus distintas disciplinas está a la altura de las circunstancias. El problema, desde mi punto de vista: hubo un momento a más-menos la mitad del documental en que a mi mente se le crujieron los esquemas. Algo no encajaba. Lo pintaban todo muy bonito, muy «divino de la muerte», que diría la malograda Carmina Ordóñez. Parecía que fuese todo miel sobre hojuelas. Y así es donde mi sentido común me avisó de que debía ser sanamente suspicaz, lo suficiente y necesario para no creerme a pies juntillas lo que veía. Como documental tiene muchas virtudes. Y defectos. Donde hay bien hay mal y donde hay luz hay sombra. Así de sencillo. Y en este documental todo es bueno y luminoso. DEMASIADO. Eso me lleva a, analizado el documental, ir dónde quiero llegar, al núcleo duro del asunto.
    Cuando dije antes que era apolítico no me refería a que la política no me interesase, sino a que los políticos me asquean (la política es una cosa; los políticos, otra muy diferente). Ya me asqueaban antes de la pandemia. Desde que ésta empezó me asquean mucho más, desde Sánchez y su ficticio comité de expertos, por el que debería ser procesado por mentir a la ciudadanía, a Casado y su pasada de revista a médicos en la Plaza del Sol como si fuese cierto generalísimo, infame a las mil. El problema en España es la sodomización politicasta que ha tenido el país desde 1936, de la que aún no se ha curado y un día tendrá que hacerlo. Hay una permanente obsesión con llevarlo todo al terreno de los políticos, de los fachas o progres, del partido de turno que tiene por bandera «entre yo y la realidad, ¡que se jod* la realidad!» (algo palpable en TV y prensa: dependiendo a quién se lea y escuche parece que vivamos en dimensiones alternativas). Y entonces el proceso se invierte: en vez de adaptar tu criterio a la historia, que sería lo normal, adaptas la historia a TU criterio. Ese es uno de los grandes males que azotan al país. La historia es un hecho social, es el patrimonio de todos los españoles con independencia de su lugar de nacimiento, sexo, credo, raza y religión, no el interés espúreo y perverso de una selecta minoría (nunca mejor dicho; de ahí lo de «politi-casta») que tienen una noción siniestra, muy siniestra, de lo que es y debe ser España. Los políticos y sus filiales y filiados de los ámbitos académicos no pueden reinterpretarlo por servir a los deseos de su líder. Es más, no deben. Al margen del documental en sí, estoy muy harto de que los González/Zapatero/Sánchez y los Aznar/Rajoy/Casado que ha habido y habrá reclamen como propio y autóctono lo que es de T-O-D-O-S. No es su privilegio, es nuestro por derecho de nacimiento, por dios.
    Hace ¿10 años, más? alguien en TV (no recuerdo quién) se quejaba de que España tenía un problema único a nivel mundial. Lo personalizo para explicarlo: si yo me reclamo ser español, viene un señor que afirma ser la autoridad a decirme que soy de mi comunidad, pero si empiezo a decir que soy de mi comunidad, viene otro señor de la autoridad a decirme que soy español. Así no se puede. Es un comedero de tarro descomunal, del que claro está los gobernantes sacan partido: enfrentándonos a los gobernados entre nosotros, no nos unimos contra ellos (a tal efecto recomiendo Flash Gordon, la película de 1980. Sí, lo sé, cutre hasta para la época, pero la estrategia de Ming para enfrentar a las distintas tribus del planeta Mongo entre si a fin de no unirse contra él es algo digno de un buen análisis). En mi caso concreto, tengo clara mi identidad: de mi ciudad, de mi región, de mi comunidad, de mi país, de mi continente, de mi planeta, de mi sistema solar, de mi galaxia, de mi universo. Una forma algo exagerada de expresar que la identidad es algo plural, que nunca somos una sola cosa. Somos la suma de muchas cosas, a diferencia del dictador que nos dividía entre «franquista» y «anti-franquista», los cuales evidentemente estaban mejor bajo tierra por traidores a su patria. Cuidado, que esa idea del «si no estás conmigo estás contra mí» sigue vigente hoy día. De hecho en el documental hubo un par de momentos que dudé si alguno de los que salían serían del brazo en alto de estar en aquella época. Por muy expertos académicos que sean, también son personas. Y no siempre se separa la profesión de la pasión personal.
    -«Corriente de deslegitimización y denigración»: normal que la haya. Nunca los líderes tan estado tan faltos de confianza y credibilidad. Si el poder deja de ser fiable, y en teoría es el poder quien cuenta la historia, ¿cómo vas a fiarte de la historia?. Pues no lo haces, te la inventas. En tu beneficio, claro. Porque si la inventas es para ser mejor que el vecino, para ser superior a él. «Yo gano, tú pierdes. Yo tengo razón, tú no».
    -«Análisis exageradamente sesgado»: es que no existe la imparcialidad, ya de entrada, que no somos máquinas. Otra cosa es que las tendencias se lleven al extremo, algo terrible hacia cualquier lado. Izquierda o derecha, da igual. Y lo de «cuatro progres resentidos y envidiosos» reitera esa sodomización de la que hablaba. Incluso en un documental de historia, los bloques salen a enfrentarse como si fuesen miuras. Así tampoco se puede.
    -«Me siento muy orgulloso de éste país»: ¿y si en vez de orgullo intentamos sentirnos dignos de ser españoles?. ¿No sería mejor trabajar y hacer algo para sentirse digno de tu país que sentarse a rascar ciertas partes del cuerpo porque como hay orgullo de ser español no hace falta hacer nada más?.
    -«Juzgar con nuestros valores y patrones de pensamiento actual hechos del pasado»: revisionismo histórico. Más peligroso que Rompetechos en Chernobyl o Fukushima. No necesito decir más. Bueno sí, un botón de muestra: a los niños norcoreanos en el colegio se les dice que los misiles los inventó Corea del Norte en el siglo XVI (lo vi en otro documental).
    -«Diferencia entre Nacionalismo y Patriotismo»: Franco robó el sentido y sentimiento de patriotismo. Aunque citando a Óscar Wilde: «el patriotismo es la virtud de los depravados». Cuidado con eso también.
    -«Propaganda progre con un tufo ideológico caza subvenciones tremendo»: este es un tema aparte que no voy a dejar pasar. Me repugna que el cine español no sea un negocio privado como Hollywood, que lo es. Y me repugna aún más ver a actores y directores mendigando subvenciones a lo Oliver Twist. El agua, el gas y la electricidad no, pero el cine sí que debería privatizarse, y a la voz de «¡ya!». Así se evitarían injerencias del poder en el arte (como quizá, solo quizá, se haya hecho en este documental). Algo intolerable, ya puestos.
    Aunque parezca que me he ido a los cerros de Úbeda no es así, porque el documental es como mi identidad, espejo de muchas cosas y reflejo de tantas otras: del mal que es un cine controlado por el gobierno, de la historia usada como arma de división masiva, del extremo ideológico de unos espectadores que no ven más allá de «los míos» contra «los otros», y de la necesidad de purgar, con urgencia, a cierto cadáver finado en 1975 de nuestro presente. ¡Ah!, y de reclamar nuestra historia. Todos, en conjunto. Sin politizaciones.
    Quiero terminar con una reflexión y una pregunta: el pasado no es una herencia de nuestros padres, es un legado para nuestros hijos. Ahora bien, ¿exactamente qué legado queremos dejar?.

  15. Acabo de leer las reflexiones de Ángel Villar y no salgo de mi asombro. Desde las primeras líneas, D. Ángel basa su línea argumental en un ataque sistemático ad hominem de cuantos profesionales desfilan por el documental. Se apresura a colgarles etiquetas y situarlos, sin lugar a dudas, en el campo de la derecha, el conservadurismo, la incompetencia, el nacionalismo español y, por consiguiente, la descalificación total. No esperaba leer una crítica tan carente de argumentos serios y tan prolífica en juicios ideológicos sectarios.

    La película se produjo, según tengo entendido, por financiación mediante crowdfunding y es de suponer que quienes participaron en el proyecto lo hicieron sin ánimo de lucro. Ya me veo yo a todos esos prestigiosos historiadores, economistas, filósofos y músicos, a todas las personas que aparecen en la larga lista de los créditos, y a los que de buena voluntad cooperaron con su dinero, reunidos en torno a un mismo proyecto derechista de reivindicación nacional española. No quiero caer en el mismo error de D. Ángel Villar: no me costaría mucho encontrar argumentos sobre su perfil profesional similares a los que él utiliza en su argumentario.

    En favor de la película documental, quiero destacar la excelente labor documentalista, el buen ritmo en su desarrollo, la valentía de su argumentación en momentos en los que con tanta facilidad se juzga y se descalifica a quienes se sitúan en otro segmento del espectro ideológico, el esfuerzo didáctico por romper con el silencio clamoroso sobre muchos aspectos de nuestra historia y por reivindicar aquellos que, lejos de la manipulación política interesada, pueden considerarse positivos y trascendentales en la historia de la humanidad. «España, la Primera Globalización» es una película necesaria, bien fundamentada, preciosa en las imágenes, con una excelente banda musical y buena narrativa, que llega en un momento muy oportuno: cuando los sesgos ideológicos están acabando por destruir las bases que han mantenido nuestro país cohesionado a pesar de guerras, corrupciones, dictadores, monarcas absolutistas o afrancesados, agresiones externas e internas, nacionalismos periféricos, cicatería política o cortedad de miras.

    Es esperanzador que haya tantos buenos profesionales empeñados en dar oxigeno a todos los que, desde la izquierda y desde la derecha, nos sentimos asfixiados por tantos siglos de propaganda hispanofóbica.

  16. Empezar una crítica básicamente diciendo que quienes están detrás del documental son machistas(la academia de la historia), educadores del hijos de monarcas sospechosos de conservadores o directamente de fachorros colaboradores de libertad digital (Pablo Insua), simplificando la obra de Payne hasta hacerla parecer un alegato falangista y despachando «Imperiofobia» como si fuera un panfletillo desacreditado se parece bastante a una falacia ad hominem de libro

  17. Desde luego el crítico no solo emplea los tópicos de la Leyenda Negra, sino que los realza. No voy a dedicarme a desarmar la cantidad de mentiras que este ¿crítico ?hace. Más parece un hooligan que otra cosa. Pero dos muestras. Primero, negar que existiera España en tiempos de la conquista es desconocer la Historia.  Las monedas de la época,
    la moneda de la época llevaba el título de Carolus et Ioana reges Hispaniarum Indiarunlque y como símbolo se grabaron las Columnas de Hércules, las de Plus Ultra, sobre ondas representativas de los reinos Indiarum. Según comenta , FELIPE MATEU Y LLOPIS
    Catedrático emérito
    Universidad de Barcelona.
    El que el primer virreinato de la Nueva Castilla, perdón de la Nueva España nos dice por donde anda la vieja España. Y la primera isla la Castellana, dale otra vez, la española no nos dice nada.
    Por cierto Castilla tenía 5 millones de habitantes por 1 millón de Aragón, es lógico que los unos se dediquen al Oeste y lios otros al este, que ya tenían posesiones en el Mediterráneo.
    No obstante El primer Bautismo de un indígena americano tuvo lugar el 26 de septiembre de 1496 en la isla de La Española y lo realizó el fraile catalán Ramón Pané de la orden de los Jerónimos, que había llegado en el segundo viaje de Colón.
    Fue tan importante el descubrimiento, que se vino abajo la Edad Media y comenzó la Edad Moderna…¿lo entiende ahora?
    En cuanto a los historiadores, se nota mucho su intento de denigrarlos pero ser la preceptora del Rey y la Infanta es un bagaje  serio y de solvencia.

  18. Joaquin Bonnemaison

    Pablo me ha encantado tu comentario. Creo que sin proponértelo, has dado una buena contestación a CHOCKYS, que por otra parte, con todos mis respetos, decir, que aparte de situarse por encima del bien y del mal, ni soy de esto ni de lo otro, realmente no ha dicho nada en relación con el contenido histórico del documental, que creo, es lo esencial. Buen comentario con el crowdfunding. Efectivamente contestando a CHOCKYS, este documental se ha financiado privadamente aparte de la venta de derechos de emisión a RTVE. NO ha recibido nada del Ministerio de Cultura ni de ningún organismo de nuestro gobierno, solo de la Comunidad de Madrid y Ayuntamiento de Salamanca.

  19. Reflexión sobre las «reflexiones». Eran tan «fachas» que llamaron a una isla La Española. Eran tan «fachas» que crearon un Reino de Indias llamado Nueva España.

    Venga, saludos!

  20. Magazine muy mal

    Esta crítica da vergüenza ajena, en vez de criticar se dedica a desinformar al lector. Coge un puñado de falacias ad hominem basadas en la opinión del autor, coge frases sueltas y descontextualizada del documental, se atreve a cuestionar incluso las experiencias de ciertos entrevistados (por ejemplo para él no es válida la experiencia de Pedro Insua en relación a cómo se le explicó los Reyes Católicos en el colegio). Da importancia a supuestas polémicas por «errores históricos» de la obra de Roca Barea sin mencionar que esos mismos artículos han sido desmontando sacando evidentes errores o falsedades.
    En definitiva un burdo intento de deslegitimar un documental basado en el evidente sesgo del autor.
    Una web de cierta calidad debería exigir a sus autores un mínimo de calidad y objetividad.

  21. La película a mi no me terminó de encajar, por el título esperaba ver otra cosa y me fui un poco decepcionado ya que la película trata realmente de la leyenda negra con un poco de globalización.

    Pero tengo que decir que esta crítica me parece lamentable. Practicando una caza de brujas persiguiendo y acusando a los partícipes de la película documental…

    Para la gente de mi generación, que está a años luz sentimentalmente de lo que ocurrió hace un siglo en España, pero sí lo ha estudiado desde la neutralidad y además lo puedo poner en contexto por que conozco la historia de otros países que he recorrido y vivieron acontecimientos similares. Me parece una locura que haya gente que esté tratando continuamente por todos los medios de lanzar contra los que considera sus «enemigos» y tirar por el suelo algo tan terrorífico, cuando ya se hizo una transición y se cerró aquella etapa.

    Más locura aún me parece cuando lo que defienden mirando al pasado no es más que un régimen ideológico que pretendía convertir españa en una marioneta soviet, pues solo tenéis que visitar el este de europa, para saber en qué se habría convertido españa, quizá yugoslavia sería el mejor ejemplo, un país que por cierto ha desaparecido engullido en sus propias miserias…

  22. He leído hasta lo de que España no existe, ni existirá hasta el siglo XVIII. Ya había partes del discurso-crítica que me llamaban la atención, pero esto último me ha dejado perplejo 🤣.

    A Felipe II ya desde su nacimiento se le otorgó el título oficial (literalmente) de Principe de España, que posteriormente al ser coronado pasó a ser el de Rey de España. Es decir, que hablamos de que España como tal existe al menos desde principios del siglo XVI, aunque ya a finales del siglo XV, fuera de la península se utilizaba por parte de los extranjeros el gentilicio de «españoles» a los habitantes peninsulares de los reinos unificados de Castilla y Aragón.

    1. En nuestro Romancero, que se fue engrosando durante toda la Baja Edad Media (s.XI-XV), se hacen continuas alusiones a la «Pérdida de ESPAÑA» es decir, a la destrucción del Reino Visigodo de España por parte de la invasión musulmana.

  23. A este señor Villar le deberían contratar las clases dirigentes criollas para que les refuerce el relato antiespañol mientras ellas siguen explotando y despreciando a las poblaciones indígenas. Que lea las letras de himnos, canciones y relatos diversos que corren por América y se dará cuenta de la burda manipulación a que someten desde la época de la Independencia a las masas alfabetas y analfabetas. Viví allí muchos años y, como español, siempre me echaban en cara los «horrores» de la conquista. Siempre les decía lo mismo: decídselo a vuestros abuelos, que los míos, pobres campesinos de la Castilla profunda, ya tenían bastante ración de explotación y de miseria con los mandamases que no vinieron acá.
    El documental tiene una tesis que creo nadie ha mencionado: ·los que crearon la leyenda negra no tienen vergüenza y más vale que barrieran su propia casa antes de meterse en la ajena. Pero el documental, como estúpidamente dice el autor, no explica que la conquista española fuera una ocupación pacífica y cortés. Lo que ocurrió a los pobres indígenas fue que tuvieron que decantarse entre guatemala y guatepeor. Los pobres siempre pierden. Hice mi tesina sobre la novela de un autor indigenista, Ciro Alegría y su obra «El mundo es ancho y ajeno». El terrible fondo de la novela es que las comunidades indígenas sufren la depredación y el abuso tanto de las autoridades republicanas como de los infames gamonales (terratenientes). La sensación que tienen los pobres indios es que cuando llegan los azules les amargan la vida y les quitan lo poco que tienen, y cuando llegan los rojos, la cosa no mejoja.
    Las facultades de historia deberían tener profesores con vocación de historiadores, no de agentes políticos del poder o ideología de turno.

  24. He leído tanto la crítica de este «historiador» como los comentarios que ha generado, y quedo gratamente sorprendido al comprobar la opinión casi unánime de todo el mundo: esta no es una crítica cinematográfica, ni siquiera es histórica (ya que la mayor parte de su artículo se dedica a difamar y desacreditar a los expertos consultados en base a prejuicios ideológicos), se trata de una opinión políticamente sesgada, supongo que sería perfectamente encajable en alguna tribuna de EL DIARIO, INFOLIBRE, EL PAÍS, PUBLICO o EL PLURAL.
    Está predisponiendo en contra de esta película al público que aún no la ha visto. Es un artículo lamentable porque está utilizando una revista digital, que a priori, me parece neutral, como un altar donde soltar una soflama basada punto por punto en argumentarios progresistas.
    Dicho lo cual, en mi opinión, el documental tiene una sólida y rigurosa fundamentación histórica pero una intencionalidad política, como gran parte del cine que se define como comprometido con una causa y es la contrarrestar el discurso negrolegendario imperante en gran parte de la sociedad española e iberoamericana y en la práctica totalidad del mundo anglosajón o francés. Las opiniones de este señor son buena muestra de lo que digo.
    En cuanto al contenido, creo que no es objeto de una revista como esta entrar en diatribas históricas, pero me centraré solo en un aspecto que me resulta de traca y son las continuas y numerosas menciones a la palabra España tachada, porque según él este término no se puede utilizar con propiedad hasta la llegada de los Borbones aunque no especifica si desde el primer Borbon, Felipe V, o el actual, Felipe VI (yo entiendo que se referirá a la promulgación de los Decretos de Nueva Planta), confundiendo una realidad de facto que venía siendo anterior incluso a los Reyes Católico con una cuestión jurídica en la que se eliminaron los consejos y las leyes de todos los territorios se redujeron a las de castilla. Poco rigor de historiador es plegarse a las tesis independentistas catalanas o vascas que es lo que sostienen desde hace décadas para reafirmar sus tesis nacionalistas periféricas (y que nos invita a imaginar cuales serán las tendencias políticas de este señor que además es gallego). En el siglo XVI o XVII cualquier súbdito de Su Majestad Católica habitante de estos territorios podía definirse exactamente igual que lo haría hoy en día: «gallego o español», «andaluz o español», «castellano o español», «catalán o español»… Otros súbditos del mismo monarca de otros territorios europeos jamás se definiría así: «¿napolitano o español?» «¿flamenco o español?» «¿milanés o español?», no era así de ninguna manera. Resulta curioso que vincule los procesos secesionistas de las repúblicas hispanoamericanas con la desigualdad de derechos de los habitantes de aquellas tierras respecto a los de la metrópoli, cuando la propia Constitución de Cádiz de 1812 (en plena víspera de las independencias americanas) empezaba con esta definición: «La nación española es la reunión de los españoles de ambos hemisferios». ¿Si pretende ser riguroso apostando por la supresión de la palabra España o español hasta el siglo XVIII por qué no propone una forma alternativa para llamar a los vascos, catalanes, castellanos, extremeños o gallegos que llegaron a América en los siglos anteriores? pues sencillamente porque no la había. Un castellano del siglo XVII no consideraba a un aragonés de la misma forma que a un flamenco o milanés, sino que sentía por el primero una mayor cercanía por razones culturales, idiomáticas, geográficas y sociológicas, en definitiva por compartir una nación común.
    Un saludo.

  25. Estoy en total desacuerdo con la critica de esta pagina, no tiene argumentación ni datos ninguno que exponer para contrastar sus opiniones. Efectivamente, y es algo que el documental no esconde (por que habria de hacerlo?), es un documental para contrarrestar las falsedades y mentiras que se han vertido y se siguen vertiendo (la muy mala critica de esta pagina es otro ejemplo) sobre nuestra Historia. No hay mas ciego que el que no quiere ver, solo hay que ver la cantidad de nativos que existen donde estuvimos los españoles y el resto de europeos, la gran cantidad de acontecimientos heroicos de nuestra Historia que son olvidados (en Filipinas se celebra la resistencia de nuestros antepasados, igual que aqui claro, aunque con las mentalidades que producen estas criticas no me extraña) asi que me da mucha vergüenza y rabia ver como esta pagina le hace la cama a la propaganda anglosajona, etc. No conocía esta pagina ni tengo intencion de volver a leerla, me gusta ver criticas objetivas y con criterio. Ya el primer parrafo deja bien claro lo que se va a encontrar uno al seguir leyendo, y efectivamente, la cantidad de mentiras y falsedades no deja de aumentar. No entiendo que tiene que ver que el director o directora de la real academia de la historia fuera profesor/a de la infanta o no se que mas, todo eso son PREJUICIOS que rallan el totalitarismo ideologico. No entiendo que tiene que ver todo eso con que lo que se diga en el documental sea la verdad o no y sea la manera correcta de contarlaes una argumentacion clasista. Y ese es el mayor problema, que se ha convertido la historia en politica, y la Historia es Historia, guste o no, y la Historia es lo que cuenta este documental, aunque, por intereses ideologicos o de otra indole, no interese a algunos

  26. ESTA AFIRMACIÓN: «Pero sin embargo no se menciona el genocidio que se cometió durante el s. XVI en el continente americano donde se diezmó hasta en un 80% la población indígena.» ES ABSOLUTAMENTE FALSA ¿De dónde sacaron semejante disparate? Como nadie firma la nota, evidentemente se esconden en el anonimato para escribir MENTIRAS. Como docente de Historia del Derecho en la Universidad de Buenos Aires y descendiente de nativos americanos, puedo DAR FE que todo esto es FALSO. De ningún modo hubo un genocidio ni una limpieza étnica. TODAS MENTIRAS PROMOVIDAS POR LOS ENEMIGOS DE HISPANOAMÉRICA.

  27. Que dice Marta, que debe ser alguien que manda aquí, que ellos dicen lo que dicen, que para eso es su opinión y que al que no le guste que no vuelva…
    Esta claro que el sesgo es palpable, que el negrolegendarismo rezuma por los poros de la opinión del «crítico historiador».
    Yo disfruto con eso, pues es libertad. La desgracia es que la opinión de quienes pensamos diferente está cerca de verse convertida en delito por los delirios totalitarios de quienes nos gobiernan y por cierto se alinean con la opinión del «crítico historiador».
    No nos bastará con decir, puedes leerme o no hayá tú con tu opinión, si no que tendremos que defendernos por no seguir la línea marcada por la historia oficial.
    Mientras tanto, Marta te invita a no volver por aquí, para que no molestes. Si trabajo no es tener una revista que interese a muchos, es tener una revista que cumpla con el relato de quienes le subvencionan.

    1. Marta Pedraza

      Esta revista no la subvenciona nada ni nadie, y como bien dices, estás tan invitado a quedarte como a marcharte. Aquí se seguirá escribiendo la opinión de quienes forman parte de ella siempre que no falte al respeto. Gracias por la visita.

      1. Estas reflexiones de este colaborador publicadas por megazinema son ofensivas por su falta de rigurosidad y su evidente tendenciosidad, insultando a los que creemos que la Historia es algo científico y objetivo, y su valoración ha de ser teniendo en cuenta la idiosincrasia y mentalidad de la época.. No habla de la duración del documental, si está todo demasiado sintetizado, de la fotografía o de cualquier otro punto técnico. A lo que va a es a enervar el contenido del mismo sencillamente porque él opina otra cosa y lo hace además de forma patética para cualquiera que haya dedicado un tiempo en su vida a estudiar Historia de España y de América.
        Así que ante esta ofensa me marcho, sobre todo ya que al parecer esta revista está sobrada de gente que la visite. Me voy a Filmaffinity donde hasta ahora no he visto colaboradores de la índole de este sujeto, del que se dice es historiador y da a entender que España no existe hasta el s.XVIII… ¡Vaya tela con el historiador!

      2. La Historia es la Historia, y no es opinable decidir si algun acontecimiento ocurrio o no, eso lo hay que demostrar con hechos y realidades, se puede opinar sobre por que ocurrio asi y no de otra manera, etc, pero lo que esta demostrado que ocurrio no se puede cambiar opinando. Y ese es uno de los problemas de hoy en dia y que es lo unico que demuestra el que aqui realiza tan penosa critica. Eso por un lado, y por otro, intentar desacreditar lo que dice un Historiador por a quien a dado clase en el pasado pues es patetico y a quien realmente desacredita es a él. Pero en definitiva, Marta, esta bien opinar, pero no como para pretender cambiar la Historia solo por que se tiene derecho a opinar.

  28. Ángel Villar…
    En el documental, que es bastante riguroso aunque a usted no le guste, no se habla sobre Francisco Franco pero usted da vueltas y vueltas haciendo ver que tiene algo que ver a través de sus comentarios, con los que a parte de hacer el ridículo, deja claro su posición de odio hacia la verdad de la Hispanidad.

  29. Seguro esto lo escribió algún hispanofobo que le queda grande pensar en civilización y solo puede ver a través de una óptica de hollywood.

  30. Buenas tardes.
    Haria usted un favor muy grande a las personas y a las generaciones mas jovenes si se pusiera usted a leer las leyes de Indias, en vez de tanto «si la culpa no era mia, ni como estaba, ni como vestia», puesto que en los 3 siglos siguientes no hay documento mas feminista. Tambien me gustaria que en vez de tanto criticar a los peninsulares, se pusiera a pensar en encontrarse usted en la cima de una piramide mientras le sacan el corazon a su familia con un cuchillo de obsidiana negra, pero si usted quiere seguir venerando la cultura azteca,sea usted tambien la primera en linea para el sacrificio en vez de critiar tanto.
    En la peninsula, los romanos conquistaron y masacraron, pero no vamos llorando por ahi haciendo cultos iberos, si no que celebramos lo mejor de los romanos, y los iberos, tambien si usted es de latinoamerica, salga a la calle a ver cuanta gente blanca y negra se encuentra comparado con mestizos.
    Sobre las enfermedades, si quiere que ahora prediquemos la exterminacion china adelante, pues la tacharan de racista, y un dato, una vez se empezo a expandir la viruela, la reina Isabel organizo misiones lideradas por su medico personal para intentar la cura.
    Y si aun despues de este comentario sigue estando convencida de que la leyenda negra es verdad, escriba usted la contestacion en azteca, no la vayamos a tachar de exterminadora de culturas. Y si aun sigue pensado que los conquistadores masacraron a los indios, revise su carnet de identidad, y al ver que su apellido viene de aquellos valientes aventureros y es un apellido peninsular, atrevase a llamar exterminadores y asesinos a sus parientes y ancestros. Y acuerdese de que Colon perdio sus derechos por esclavizar indios.
    Y lo dice una persona de medio espanola medio argentina.
    Un saludo, y ojala menos leyes en educacion de genero y mas de la verdad.

  31. Una cosa, a todas esas personas que alegan por un «análisis cinematográfico» vamos a hablar de la horrenda música de follar cuando hablan de Cortes (bendito hombre), o de las voces en off muy casuales de personajes NO académicos que salen en el documental… planos aburridos de las entrevistas (sobre todo de la Elvira) y primeros planos sin ninguna gracia… investigación histórica, mediocre y súper politizada en este documental girando a la derecha señores…. el análisis de la página me parece correcto, porque, vale vale… un documental así de estos lo ves en los años 60as y no sorprende, pero en 2021?? me lo cuentas? una vergüenza para la propia historia de España, y para las demás naciones, muy celebracionista y nada reflexivo… y vale vale volvamos a lo «cinematográfico» pues de ritmo pésimo, imágenes sin fuentes… en serio las voces en off con la música de Motel y las imágenes a conveniencia… Pésimo y aburridisimoooooooooooooooooooooooooooooooooo documental CARCA!!! si si y lo digo Cinematográficamente. Muy bien por el articulo. Gracias!

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