Estamos en la recta final e 2018 y aún pueden descubrirse auténticas joyas en forma de serie. En este caso, de miniserie. Se trata de la adaptación del best seller (el primer volumen de la saga Dos amigas) de Elena Ferrante que han hecho conjuntamente HBO y la RAI. La identidad de Ferrante es un misterio, se mantiene en el anonimato, en cualquier caso ella o él está de coguionista. Producida y dirigida por Saverio Costanzo (‘La soledad de los números primos’), ‘My Brilliant Friend’ es un relato narrado con dureza y brutalidad que principalmente cuenta la historia de amistad entre dos niñas que comenzó en el colegio en los años 50, a la vez, que ofrece una especie de cuadro costumbrista, las miserias de un barrio en la época de la postguerra recreado en la dirección con un estilo neorrealista.
Ya sólo por la excelente ambientación, absolutamente realista y minuciosa, merece la pena verla. Gracias a ella, el espectador siente la claustrofobia que transmite el lugar en el que están los personajes, un patio de vecinos. Allí asistiremos a la intimidad de la gente de un barrio de Nápoles y observaremos la violencia que hay detrás (que explota cuando menos lo esperas), la pobreza de sus gentes, el machismo imperante, la opresión, la hostilidad, la asfixia social y familiar, la desdicha tanto moral como social, en definitiva, el día a día de estos paupérrimos personajes.
El origen literario del guion es evidente. La narración arranca de la voz en off de Elena Greco, una anciana que vive en una casa llena de libros, que decide escribir la historia de su amistad desde 1950, cuando Lila, una de sus amigas más importantes (o seguramente la más importante), desaparece sin dejar rastro. Por lo tanto, decide regresar al punto en el que comenzó a andar los pasos que marcaron su vida, concretamente, al día en el que conoció a Lila, quien inmediatamente se convirtió en un espejo donde reflejarse.
Lo más interesante de la serie es el prisma desde el que está narrado. Y es que el pasado está visto desde la óptica de las dos niñas, o lo que es lo mismo, desde la infancia, periodo de vital importancia para los pequeños, quienes perciben (con toda la razón) el mundo como un lugar nuevo, lleno de posibilidades, que espera ser descubierto. Están confundidas por todo lo que sucede a su alrededor, así que para las dos protagonistas los hechos vitales se convierten en una continua aventura para explorar lo desconocido, para admirar la sorpresa y el misterio en lo cotidiano (cosa que el adulto lamentablemente no tiene, ha perdido este asombro).
En el segundo episodio, las amigas se hacen con el libro de Louisa May Alcott, Mujercitas, un trasunto de ‘My Brilliant Friend’ que habla esencialmente de la desigualdad entre clases, de la horrible pobreza, de amistad, de ambiciones y aspiraciones. Me atrevo a decir que esta miniserie italiana está entre lo mejor de este año (cuando valore la temporada en su totalidad me reafirmaré o enmendaré). Por lo pronto cada semana seguiré con entusiasmo la compleja relación entre estas dos niñas brillantes y curiosas, rodeadas de circunstancias crueles y adversas, a quienes no les queda más remedio que luchar para sobrevivir y conservar lo más importante y lo único que tienen, sus vidas.
