'Mientras dormías' (Jon Turteltaub, 1995) | Navidad en MagaZinema

Te encanta el Calendario de Adviento de MagaZinema, pero ya dudabas de nosotros- Sabemos que muchos comenzabais a preguntaros dónde estaba Sandra Bullock en una de las películas más románticas de su filmografía.

‘Mientras dormías’ (1995) es la película de Navidad que todos queremos ver, esa en la que los sueños se hacen realidad, bueno, no del todo, o mejor dicho, la vida no ocurre cómo la habíamos planeado.

Los contrapuestos son la clave de esta cinta en la que una joven con un trabajo corriente y una vida muy solitaria sueña cada día con la vida que podría tener si una de las personas que cada día pasan por delante de su cabina del metro, se fijase en ella. Una vida en la que las Navidades nunca más volverían a ser solitarias y en la que la monotonía saldría por la ventana.

Una confusión y la falta de valor para sacar del error a toda una familia nos permitirán disfrutar de una comedia romántica como ya no se hacen, donde los minutos vuelan y los personajes se quedan contigo durante días tras el visionado. Como siempre, Sandra Bullock tiene mucha parte de culpa, ya que en ‘Mientras dormías’ (1995) la vemos atraparnos con su cálida sonrisa y mirada triste. Bill Pullman también cumple con creces, y ambos nos ofrecen una película para disfrutar con toda la familia.

¿Qué mejor momento que estas Navidades? ¿Qué mejor que hoy?

El carisma de todos los personajes es la que la hace inolvidable. Cada uno de ellos aporta un ingrediente indispensable. Las localizaciones no son nada del otro mundo, nada que eclipse en ningún momento la historia, y no lo necesita, aún así es Chicago en invierno, siempre tiene encanto.

Recorremos la vida de Lucy (Sandra Bullock) de casa al trabajo y del trabajo a casa, adentrándonos en los distintos hogares de los personajes con los que se cruza, y eso es lo que la hace entrañable.

‘Mientras dormías’ (1995) podría ocurrirle a cualquiera, no hay lujos, ni inalcanzables, como en otras comedias románticas que no puedes creerte y eso crea la sensación de familiaridad que hace volvamos a ella por Navidad, porque aunque han pasado ya veinticinco años hay guiones que no se hacen viejos, y la preciosa interpretación, rodeada de momentos muy divertidos y tiernos te dejan con un buen sabor de boca una vez has terminado de verla.